Otro clásico en una final: Independiente le ganó a Racing, salió campeón y va al Regional

El Rojinegro le ganó por 2-1 la final de la Liga a Racing en un duelo histórico de la localidad de Puerto San Julián, Santa Cruz, e irá al Torneo Regional Federal Amateur. A lo Boca – River, pero en el fútbol del interior.

El gol, señor gol, significó tanto que el zumbido del viaje de la pelota por el aire va a dar vueltas en los tímpanos quién sabe hasta cuándo. Y es que, entre los nervios y la emoción, fue un recorrido eterno ese zurdazo de Enzo Medina, ese golazo que llevó a la Asociación Club Independiente a lo más alto otra vez, a inflar el pecho, a hacerse indiscutible, a ser el campeón de campeones ante su rival de toda la vida.

El 8 de diciembre de 2018 quedará marcado para siempre en la historia del fútbol de Puerto San Julián. En el Estadio Francisco “Pancho” Novoa, las dos instituciones emblemas de la localidad, clásicos rivales que se enfrentan desde 1928 en disputas deportivas, definieron el campeón unificado de la Liga de Fútbol Zona Centro 2018 y, por ende, quién participará del Torneo Federal Regional Amateur 2019, certamen surgido de la fusión del Federal B y el Federal C.

La Asociación Club Independiente, campeón del Torneo Apertura 2018 Luis “Conejo” Arzest, y Racing Club, ganador del Torneo Clausura 2018 “50 Aniversario”, salieron al Cementerio por segunda vez en dos semanas, puesto que ambos venían de enfrentarse en la última fecha de la Liga de Fútbol Zona Centro, en la cual igualaron 0-0. Sin embargo, esta vez había una frutilla del postre única: el ascenso. 

En un partido con tinte de histórico, el Rojo demostró altura. Aceptó disputar esta final en cancha de Racing, salió a poner la pelota al piso y, con momentos de buen fútbol y también de muchísima actitud, tiró sobre el césped toda la experiencia de un plantel que sabe de partidos importantes, que jugó tres Torneos Federales consecutivos y que, si bien no tuvo un buen Clausura, había sumado su sexta estrella en el primer semestre de 2018.

Independiente, que padeció lesiones y suspensiones durante todo el certamen, siempre tuvo claro que la superficie iba a favorecer a su juego. Salir desde el fondo y apostar al toque, como ocurrió en el primer gol: pase de Portillo en profundidad, asistencia del imparable Triviño y zurda a colocar del capitán López Guerra, nuevamente en el mediocampo. El Rojo juega al fútbol porque tiene con qué: Jonathan Medina regresó al arco sin resquicios de su lesión, Salazar hizo un trabajo impecable con el difícil Molina (aguerrido centrodelantero de la Academia), Gallardo y Baragaña ya dejaron claro que son hombres hechos y derechos, Duarte impuso su indiscutible calidad por la banda izquierda y los hermanos Guerrero (Sebastián y Lucas) son de esos mediocampistas para sacarse el sombrero.

El empate de Racing trajo un cambio repentino en el trámite del encuentro, hasta entonces ampliamente dominado por el equipo dirigido por Carlos Padín y su ayudante José Trujillo. La Academia, empujado por su gente, comenzó a llevar al Rojo contra su arco. Sin embargo, ahí, en los momentos difíciles, es donde aparece la jerarquía. Enzo Medina tomó la pelota, controló y convirtió uno de los goles más importantes de la historia del club, dándole pie a la gloriosa e incondicional 77 para que coreara su nuevo hitazo: “El Enzo Medina, que loco que está…”.

El plantel: Yuale Alexis, Bernardo Pablo, Medina Jonatan, Lara Mirko, Arregui Matias, Crespo Ángel, Baragaña Mateo, Haros Sebastián, Gallardo Nicolás, Salazar Rubén, Fredes Axel, Bejarano Brian, Opazo Ezequiel, Duarte Santiago, Guerrero Lucas, Guerrero Sebastián, Mansilla Lisandro, Bejarano Nahuel, Balcazar Axel, Portillo Alejandro, Bertolaza Marcos, López Guerra Jonathan, Triviño Leandro, Miranda Leandro, Medina Enzo, Fraser Duncan, López Facundo, Gaetan Javier y Martínez Geronimo.

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