Viejos son los trapos: Martín Pérez y Mario Rojas, cómo vencer al tiempo

Martín Pérez y Mario Rojas son dos de los tantos jugadores que con gran esfuerzo domingo tras domingo le dan vida a los torneos federales. De una punta del país a la otra, el primero en Ushuaia con 50 años y el segundo en Monterrico con 51, estos dos arqueros demostraron que cuando hay pasión, dedicación y compromiso, la edad queda en un segundo plano.

Por Matías Calviño (Interior Futbolero).

El ascenso profundo del interior del país siempre ha brindado historias que son más que dignas de contar, como jugadores que luego llegaron a primera, tempraneros debuts de juveniles, equipos que realizan enormes esfuerzos para poder competir o clubes que han tenido que salir del país para llegar a otras ciudades argentinas y disputar sus encuentros. En este caso, la lupa se centra sobre la vitalidad de dos arqueros, uno en cada extremo de la Argentina, que a con 50 años de edad hicieron su participación en el Torneo Federal C 2018.

Bien al sur del país en Ushuaia, la ciudad más austral del mundo, vive Martín Pérez, quien este domingo se retirará de la actividad futbolística cuando Ferro Carril Oeste, su equipo, dispute su último compromiso en la penúltima categoría del fútbol argentino ante Bernardo O’Higgins de Río Grande. El pasado 30 de enero marcó un hito en el fútbol argentino al disputar con 50 años los 90 minutos del partido que Ferro y Mutual Banco Tierra del Fuego empataron en dos goles por la primera fecha del Federal C. Y marcará otro este domingo cuando complete casi la totalidad de los seis partidos de la primera ronda, ya que la fecha pasada sólo atajó 45 minutos.

Martín Pérez, que ya disputó ocho torneos de estas características en siete equipos diferentes, comenzó su camino en el fútbol en 1983 en las inferiores del Club Atlético Vélez Sarsfield en donde entró en la sexta división hasta quedar libre en la cuarta. Allí tuvo oportunidad de compartir equipo con Raúl Pacha Cardozo (campeón de todo en el inolvidable Vélez de Bianchi) y Ezequiel Castillo (que luego jugó en Argentinos Juniros y que fue dirigido por Jorge Valdano en Tenerife), entre otros jugadores. Luego de pasar brevemente por las filas de Defensa y Justicia y Quilmes, la vida de Pérez dio un giro total, ya que en el banco donde trabajaba le dieron el pase para la sucursal que este tenía en Ushuaia, la ciudad que lo había acogido cuando tenía seis años. Allí prosiguió con su carrera de arquero en distintos clubes de la capital fueguina y de Río Grande, la otra urbe junto a Tolhuin de la provincia más austral.

Martín Pérez, dejando todo ante Mutual Tierra del Fuego. Foto: Nicolás Mazzini (Fuego Foto).

Si bien la campaña de Ferro no ha sido la esperada (sobre cinco encuentros disputados, la filial del histórico club de Caballito perdió tres y empató los otros dos), el balance que hace Pérez es positivo. “Creo que lo hemos hecho bien, porque independientemente del resultado el plantel es muy pero muy joven, con muchos chicos de 17 y 18 años, y estuvimos a la altura. En lo individual también me sentí muy bien, pero ha llegado el momento de despedir con mucha alegría todo esto, aunque seguramente seguiré ligado, porque me gustaría dirigir”, relató el experimentado arquero para Interior Futbolero, que ya tiene experiencia como entrenador en Futsal de AFA. “Estoy con poco tiempo de todas maneras, ya que al mismo tiempo hago radio, televisión y también escribo, y es un deseo que tengo abrir una escuelita de arqueros”, agregó el también periodista deportivo que cubre el deporte de Tierra del Fuego en el portal informativo La Bestia Deportiva.

Pero Martín Pérez no está sólo en esta aventura de disputar un Federal C con cinco décadas en el haber. Desde Monterrico, una ciudad ubicada 35 kilómetros al sur de San Salvador de Jujuy, el extremo opuesto de la Argentina, y donde hace las veces de local el Club Atlético Monterrico San Vicente, Mario Rojas, otro arquero, dio la nota el último fin de semana al hacer su debut en el torneo con 51 años cuando reemplazó al titular Raúl Cano, lesionado en el segundo tiempo del cotejo en el que su equipo visitaba a Sportivo Rivadavia. El domingo pasado corrían 23 minutos del complemento cuando Cano tiró la pelota fuera del campo de juego y pidió el cambio debido a una lesión. Con el partido una a cero a favor de Monterrico, se prendieron las luces de alerta para Rojas, que con 33 años de carrera esperaba su oportunidad para debutar en el torneo.

El arquero, titular durante la campaña de la liga departamental de El Carmen en la que Monterrico logró su clasificación al Torneo Federal C, es referente e ídolo de la institución blanquiroja y a su ingreso en el campo de juego el capitán del equipo Facundo Galarza se sacó la cinta para cedérsela justamente a él. Rojas defendió correctamente la valla de su equipo en un partido que careció de emociones fuertes, sin embargo no pudo evitar el empate agónico de Juan Abregú para Sportivo Rivadavia. La actualidad de los jujeños es bien diferente de la de los fueguinos, ya que con 11 puntos, producto de tres victorias y dos empates, aseguraron su clasificación a los play off cuando todavía resta una fecha por jugarse en la etapa regular, por lo que Mario Rojas, aún con hilo en el carretel, seguirá esperando desde el banco con el número 12 una nueva oportunidad para hacer lo que más le gusta: defender el arco de Monterrico San Vicente.

Martín Pérez y Mario Rojas son apenas dos ejemplos de los tantos que existen en el ascenso profundo de la Argentina, aquel que brinda un sinfín de historias dignas de ser contadas y que en estos días, tras la reforma con la que el Consejo Federal impulsa la eliminación de los torneos Federal B y C, afronta momentos decisivos para su futuro.

P