Alvarado se fue aplaudido del Mario Alberto Kempes por la gente de Talleres que destacó su entrega y que sabía todo por lo que tuvo que pasar para llegar a este encuentro. También aprovechó para castigar a su equipo, que no pudo marcar las diferencias físicas y futbolísticas como había hecho en el José María Minella, y se quedó con el triunfo por 1 a 0, pero tranquilamente pudo ser empate. Digna actuación del “torito” que otra vez se queda con las manos vacías por la falta de variantes en ataque y la poca profundidad.

El conjunto de Carlos Miori sumó su quinta derrota consecutiva y, quizá, de esta serie de partidos fue en el que menos (o el único) en el que no mereció perder. Porque le pudo jugar de igual a igual a un equipo que está armado para otra cosa, le generó zozobras y lo obligó a terminar pidiendo la hora. PeroAlvarado careció de aceleración en los metros finales y de hombres importantes en el área rivalpara alzarse al menos con un punto.

La insistencia y el protagonismo del local duró hasta el gol. A los 21’, Godoy fue derribado dentro del área y Julio Mozzo sentenció a Aldo Suárez desde los once metros, para poner el 1 a 0 para Talleres, que daba la sensación quebraría definitivamente el encuentro. Porque en los últimos partidos, cada vez que quedó en desventaja, el “torito” no tuvo respuestas y terminó siendo ampliamente superado.

Sin embargo, no se desesperó, siguió haciendo su juego y en un desarrollo de discreto para malo, pudo haberse ido en igualdad al descanso con un remate de Carrizo que se estrelló en uno de los palos de Federico Costa. La expulsión de Rodrigo Chaves en tiempo de descuento, abrió aún más la esperanza albiazul.

En el complemento, la tónica no cambió demasiado, Leonardo Verón era el hombre más importante de Alvarado, pero no aparecía ni Depetris ni Cortadi para lastimar en los últimos metros. El local jugaba un partido adentro y su gente lo hacía en las tribunas, de cara a las próximas elecciones.

La posesión de la pelota fue mayormente del “torito” que tuvo el empate en los pies de Ezequiel Corbalán, pero la pelota dio en el brazo de Formica. Pero además de sumar problemas, Alvarado no liga y los árbitros no lo ayudan (cobrando lo que corresponde), para poder quedarse con una unidad.

Con los marplatenses jugados, cerca del final pudo estirar la cuenta Talleres, con Mozzo que perdió con el rápido achique de Suárez y un cabezazo de Godoy que explotó contra el travesaño. El pitazo final mostró el descontento de los hinchas de la “T” que reconocieron el esfuerzo de Alvarado y silbaron a sus jugadores que mostraron una versión poco convincente para pelear el ascenso.