TIRO FEDERAL (B. B lanca) 2 – 4 FERROCARRIL SUD (Olavarría)
El Carbonero lo goleó 4 a 2 en el mismísimo Onofre Pirrone. Floja actuación del aurivioleta, que mostró llamativas grietas de tres cuartos de cancha hacia atrás.
Por Fabián O. Rodríguez / [email protected]
Foto: La nueva provincia
En una noche para el olvido,Tiro Federal se despidió de su invicto. Superado en todos los estamentos del fútbol por Ferro de Olavarría, el elenco de Darío Bonjour cerró una semana negra.
Tras la eliminación ante Liniers por la Copa Argentina, el aurivioleta mostró llamativas grietas defensivas y lo pagó con una contundente caída en casa ante el Carbonero por 4 a 2. El dueño de casa entró dormido y lo pagó caro. Permeable en la última línea, la visita se lució en el primer cuarto de hora con mucha movilidad y efectividad en los metros finales.
Lezcano falló en un tiro libre lejando de Joel Zalazar y Joaquín Zalazar aprovechó el rebote recto, ante la pasividad de los tirenses, para sacar la ventaja. Y tras cartón, Joel Zalazar le escapó a la marca de Cafasso por la dereecha y le puso un centro a la cabeza de Longhini, quien no perdonó en el segundo palo.
Atónito, el local trató de recomponer la imagen. Sin embargo, le costó horrores hacer pie y generar juego al ras del piso. Incluso, el entrenador Darío Bonjour pateó el tablero y mando a la cancha a Lefinir por Grassi para equilibrar el mediocampo. Sin embargo, la visita nunca bajó la guardia y, cuando se encendió Joel Zalazar, amenazó con bajarle la persiana al partido. Y en un córner a favor del local, Ferro llegó al tercero. Joel Zalazar le puso un pase largo a Di Bello y el 4 tocó para que Longhini convirtiera de derecha. Pero cuando se moría la primera etapa, el aurivioleta pudo gestar la primera acción lúcida y achicó la diferencia. Filippini tocó para Leobono y la Porota dejó a Fede Miño cara a cara con Bigliardi. El 9 no falló y Tiro quedó dos goles abajo.
En el complemento, la escuadrade Darío Bonjour tomó el control de la pelota y del territorio. Pero comenzó a jugar a la ruleta rusa en el fondo. Casi mano a mano, quedó expuesto. Cada ataque de Ferro fue una amenaza. Y Janson le sacó brillo a la zurda y metió un golazo olímpico. Parecía ser el impacto definitivo, pero Matías López descontó de cabeza en una pelota parada y le dio una mínima expectativa al anfitrión.
Mientras Ferro perdonaba de contra, Tiro tuvo dos chances para ponerse a un gol. Pero nada se modificó hasta el final y el Carbonero volvió a sacar pecho en Bahía y lo llenó de interrogantes al aurivioleta.