El Flaco, gran artífice de la épica remontada de Sports en el Federal B que lo mantuvo en la categoría.
producto de una extraordinaria seguidilla de cuatro victorias al hilo, sin precedentes para el Comadreja en la categoría, habló en un mano a mano con EL DEPORTIVO, ratificó su posición de terminar su ciclo tras cumplir el objetivo de la permanencia y se mostró agradecido por los meses vividos: “Lo disfruté mucho, pero fue solo eso. Hablando con mi esposa, pensaba que la única manera de rever la continuidad era si descendíamos. Ahora, quiero volver a disfrutar el camino que me había planificado, que es la familia”. Teniendo en cuenta que regresaste con un plantel ya conformado y con dos competencias en plena disputa, pero con el gran y principal objetivo de mantener la categoría en el Federal B,
¿Fue el desafío más importante que tuviste en Sports? “Sin dudas que era un desafío importante. Siempre digo que el fútbol no es para cagones y casi que la vida, te diría y no era algo imposible, pero si era una tarea, quizás un poco difícil, pero siempre dependiendo de cómo encaminábamos todo para tratar de llegar al éxito. Había dos opciones, que se diera o no, pero lo importante era que se encamine y se estuviera, por los menos, cerca de lograrlo. Para eso era importante hacer un diagnóstico como cuando un médico agarra a un paciente para saber que hay que cubrir y que hay que atacar rápidamente y donde hay que potenciar. Había que armar un equipo que tenga tolerancia en cuanto al resultado, porque los partidos terminan a los 90 minutos y había visto que Sports los terminaba mucho antes, entonces lo primero fue eso, llevar al equipo a que termine los encuentros a los 90 y pico de minutos y si es con el saldo a favor, mejor y si no, que sea por un gol abajo, cosa de que en 4 o 5 minutos, se pueda igualar un partido. Sports estaba acostumbrado a recibir muchos goles y cada vez que ocurría, no remontaba los resultados, entonces en vez de fortalecerte, al contrario, te vas frustrando y eso se transforma en el día a día, en la semana y cuando no lo podes cortar se lleva el año y pudimos cortar con eso”.
Tras haber terminado su primer ciclo en Sports, el Flaco Nasta se alejó totalmente del ambiente del fútbol y ahora, cuando decidió volver a dirigir, se permitió dudar acerca de cómo iba a ser tal reincorporación: “Tenía la mezcla/duda/temor de cómo me iba a reinsertar en el fútbol después de dos años sin mirar, ni leer nada. Estaba totalmente desactualizado. Creo que eran más las dudas hacia mi vocación o profesión como iba a resultar, a lo que podían llegar a dar los jugadores, porque además tuve la suerte y la confianza de estar con el Profe César (NdR: PF: César Sterpetti), que conoce a los chicos, había estado en el proceso e inclusive habíamos trabajado juntos en la última etapa mía y se anexaba Hernán (NdR: AY: Hernán Plana), a quien ya todos lo conocen, es una persona que quiere mucho al club y que su colaboración iba a ser muy importante para mí”.
¿Qué significó haber conseguido dos objetivos tan importantes en tan poco tiempo? “En mi paso anterior, el Torneo Local siempre fue desestimado y era algo en el que había intercambio de opiniones. Hoy, con el diario del lunes y como se ha vivido el Torneo Local este año, creo que tendría que pedirle perdón al anterior grupo de jugadores. A ese grupo que clasificó a la siguiente instancia del Federal B para jugar fases decisivas, porque ese grupo también se merecía un título local, pero bueno, la visión del momento y los tiempos, hacían que no diera para encarar dos torneos, aunque a pesar de eso, siempre estuvimos cerca, pero con otros tipos de formaciones. La realidad es que esto que nos tocó protagonizar fue ajustado, pero estuvo bien pensado. Había que agilizar la definición del Torneo Local, que era lo que nos iba a dar el margen para encarar la recta final del Federal B”.
¿Tuvieron un poco de esa fortuna necesaria en el último partido con General Rojo? “La suerte en todo ámbito de la vida es necesaria. Hay veces que la buscas, hay veces que la mereces y hay veces que no. Hablar de merecimientos por ahí es injusto, pero creo que habíamos transitado partidos donde habíamos merecido otra cosa y no lo pudimos mejorar, y siempre les decía a los muchachos que todo se equilibra al final. Hay una balanza que siempre tiende a equilibrar, el tema para nosotros es que tenía que ser este año y en este torneo”. Con respecto a ese último encuentro que ratificó al Rojinegro en el Federal B, Nasta, agregó: “Veníamos tumbando estadísticas y el último partido no podía ser de otra forma, porque sabíamos que íbamos a enfrentar a un rival que no había perdido, que le habían convertido un solo gol, quería mantener el invicto y algunos jugadores no iban a estar por lesión o por estar suspendidos, pero se vio a un General Rojo que en todo momento tuvo intenciones de ganar el partido, pero lo que si se veía era a un equipo que al estar relajado por no jugar por una clasificación, si bien creaba situaciones, a la hora de la definición, no tenía los dientes apretados de otro equipo y con esto no quiero decir que la tiraban con esto no quiero decir que la tiraban afuera a propósito, al contrario, pasa hasta en un entrenamiento. Lo que les traté de hacer entender a los jugadores es que había que saber generar un poder y una mente ganadora que potencie al máximo cada momento, tanto sea a favor, como en contra”.
Siempre minucioso en todos los aspectos, Nasta no se olvidó del Loro, quien también formaba parte de esta definición por el descenso por enfrentar en la última fecha a un rival directo de Sports: “Más allá de que podía haber tenido incidencia en el destino final nuestro y finalmente no lo tuvo, de todos modos, destaco la predisposición de Defensores de salir a ganar su partido contra Atlético Baradero.
A su vez, nosotros sabíamos que el cero en nuestro arco nos aseguraba, mínimamente, un desempate o la permanencia en sí. Es la primera vez que no planteo un partido donde se necesita un empate a ir empatarlo. Es la primera vez que lo dejo librado un poco al azar y a hacer un juego más abierto, porque sin jugar bien y sin ser el partido que uno quería, no cerramos líneas, en el mediocampo estuvimos anchos y hasta a veces muy expuestos a un ataque de Rojo, también muchas veces quedamos mano a mano, pero porque teníamos la intención de manejar el partido o manejar la pelota lejos de nuestro arco y no se dio. En la cancha no hay lógica, en el fútbol se depende mucho del momento y nunca hay una receta para ganar un punto. Depende mucho de la racha/suerte que tenga el cuerpo técnico, porque hay veces que te sentís ganador y cualquier cosa que haces, genera algo positivo. Los jugadores tenían que saber que era esta y no había otra y el año se terminaba con un descenso o no”.
¿Por qué optaste por Aliata y luego por Garay de 4, Lucas Chávez de 5 y el cambio en el arco sobre el final? “Cuando asumí en Sports y empecé a hacer testeos en los entrenamientos, me di cuenta que Aliata podía ser un lateral a futuro y ahí también me di cuenta que Maza tenía que ser central. Entonces, el tema era prepararlo para que en el momento de jugar, Aliata pueda rendir. Me pareció un chico con mucha personalidad, obviamente no tiene la experiencia y el rose de otros jugadores, pero comprometido. Le fui dando minutos en la mitad de cancha para que agarre confianza para después ir mutándolo a la posición donde realmente iba a estar. Tuvo la suerte que tocaron las finales con Defensores, partidos decisivos y sin ser descollante, tuvo una actuación a la altura de una final. La realidad es que en principio, Maza iba a ser el lateral por la derecha y Bonomi central, pero Diego al no estar en la semana con el grupo, era imposible armar una defensa con un jugador en Buenos Aires y tres en Salto, entonces, opté por Maza como central si o si y Aliata de lateral”.
“Con respecto a Garay, hace prácticamente un mes y medio había hablado con él y le había preguntado si había jugado de lateral o de volante por derecha, estimando que en las fechas finales iba a necesitar jugadores con salida desde el fondo o volantes con llegada y que en la zona media veía que la tenía que ocupar un hombre de experiencia, ya que iban a ser partidos muy bravos, donde no había que desorganizarse, había que tener cierto equilibrio y había visto en Lucas Chávez al jugador ideal para eso, más allá de que en su momento él no estaba preparado para los 90 minutos, pero también fue un proceso, se lo fue llevando de lateral, contra Defensores en las finales fue un buen testeo, donde prácticamente jugó solo en el medio porque a Garay lo mandaba un poco más a la derecha”. “Lo del cambio de aquero tiene su explicación. Siempre me hablaron maravillas de Luis (Mancilla) desde que llegué a Sports y parte de la solvencia y del ascenso tuvo que ver por él, pero yo también lo conocía a Federico (Verge) y también pensaba en que iba a necesitar un arquero que en los partidos finales maneje un poco más el balón con los pies. Era algo que ya lo venía pensando y diagramando. Lo saqué a Luis en un momento donde habíamos ganado, hablé con él, lo entendió, sabe que tiene muchas cosas por mejorar, es joven y además de entender el mensaje, siguió sumando, que es lo más importante; y Federico nos dio la seguridad para los partidos finales que íbamos a necesitar”.
¿Es inamovible la postura de terminar acá tu segundo ciclo en Sports? “Si, si. Eso era algo que ya estaba hablado. Obviamente que los resultados, el rendimiento o la vuelta puede generar la confianza o la posibilidad en la parte externa de que uno pueda continuar, pero era algo que ya estaba expresado. Lo único que el otro día hablando con mi esposa podía cambiar, era si llegábamos a descender. Si perdíamos la categoría, por ahí reveíamos la posibilidad y le metíamos al Federal C hasta devolver a Sports adonde estaba”. Manteniendo la postura con la que aceptó volver por estos pocos meses, Nasta se permitió añadir: “Lo disfruté mucho, pero fue solo eso. La idea era dejar las cosas en su lugar, por suerte se dio y ahora, feliz porque son dos objetivos, por un lado el Torneo Local y el Federal B y por otro lado, ahora volver a disfrutar de la familia. Había dejado esta profesión para proyectar, armar una familia y disfrutarla y fíjate que el fútbol era mi pasión y mi vida y lo cambié por algo que no se puede comparar. Ahora con el respeto que todos me merecen, uno lo que pide es que respeten eso. Lo que quiero es disfrutar de mi hija, Almendra, le agradezco a mi esposa, Angie, porque estos dos meses y pico fueron movidos. Estoy re feliz porque las cosas se dieron, calculo, de la forma que todos soñaban”.
Los 14 partidos que duró el segundo ciclo de Gabriel Nasta en Sports tuvieron mucho en juego y en ellos, Sports gritó Campeón del Torneo Local y salvó la categoría en el Federal B, sin embargo el DT se sinceró consigo mismo: “Lo viví intenso, pero sé y reconozco que no estaba al cien. Soy una persona que me gusta, cuando se hacen cosas y más en lo deportivo, estar al ciento en todo y en este caso no fue así, porque estaba con otra actividad y cuando salía de Arrecifes a Salto había entrenamientos que los terminaba de definir en los 15 minutos que dura el viaje en ruta, porque aparte tenía que ir rápido porque no me alcanzaba el tiempo. Esas cosas y la mente no es la misma cuando esta con mil cosas a la vez y por ahí hay cosas de partidos que se me han escapado por ese mismo motivo”. El cierre fue sincero y natural. Tras cumplir los objetivos, palabras de agradecimientos y de nuevo a la vida que eligió por sobre el fútbol, junto a su familia: “Súper agradecido a los dirigentes que confiaron en mí, que con sus pro y sus contras, porque hoy ser dirigente de fútbol no es nada simple, a este proceso lo han acompañado y obviamente a toda la gente que estuvo. Cuando todo se alinea y se pone en positivo, las cosas se hacen más factibles. No me voy a cansar de agradecerle a mi familia que me apoyó en cada fin de semana, que eran exclusivos de mi hija, Almendra y pasaron a ser del fútbol. Fue un cambio rotundo en la vida de una persona que ya había dejado todo esto de lado, entonces ahora quiero volver a disfrutar el camino que había planificado, que es la familia”.
