RACING (Córdoba) 2 – 2 LAS PALMAS (Córdoba)
Las Palmas y Racing animaron un partidazo en el viejo camino a La Calera e igualaron 2 a 2. Punto que le sirve más a uno que a otro.
En una verdadera batalla en el barro, el Azul y la Academia regalaron un encuentro con muchísimas emociones. Gonzalo Soria abrió la cuenta para el local, pero luego Juan Echarri y Hernán Olocco aventajaron a la visita, aunque finalmente Nicolás Palacios estableció cifras definitivas.
Estaba ideal para jugar al fútbol, el condimento de la lluvia lo hacía más especial con dejos de batalla por el contexto y la previa, que así lo hacían presumir. Las emociones no se hicieron esperar mucho y el inicio del partido le pegó un sacudón a una tarde fea y gris.
Quien se encargó de abrir el marcador fue Las Palmas por intermedio de Gonzalo Soria, que aprovechó un par de desatenciones de la defensa rival y a los 3 minutos de juego puso el primer grito. Ni siquiera se habían estudiado y ya el local arrancaba en ventaja.
Para la Academia no fue un baldazo de agua fría porque tras el gol se acomodó en cancha y empezó a tejer sociedades con Biasutti y Rami. La misma le dio fruto a los 5 minutos, cuando el eterno goleador le sirvió la mesa a Juan Echarri para poner pardas.
Ese empate le sentó mejor a Racing que jugó con mayores libertades para lastimar al adversario. Es más, el punto no servía para nada y había que ir a buscar los tres. Tomó ese papel de protagonista y tuvo ocasiones antes del final de la etapa inicial: Echarri le erró al arco con un cabezazo y Mansanelli no pudo de tiro libre.
Antes que los jugadores se vayan al vestuario, Pablo López agredió a un jugador azul y Lucas Rimoldi quiso hacer justicia por mano propia. El saldo: los dos agresores vieron la roja dejando a sus equipos con diez jugadores.
Cuando amanecía el complemento, Hernán Olocco volvió a darle un cimbronazo al partido y a la lluviosa tarde.
Tomó la lanza y pasó al ataque, cual viejo lateral brasileño, y con un derechazo certero la clavó en el primer palo de Chiatti para hacer delirar a la gente académica.
Tras encontrarse arriba en el marcador, con la necesidad de ganar, con el peso de no conocer la victoria hace cuatro fechas y la presión de un grande… Racing inconscientemente empezó a perder la posesión de la pelota y retroceder en el terreno.
A eso lo aprovechó el Azul y promediando la etapa, más precisamente a los 26, Nicolás Palacios encontró un pase certero al corazón del área y le puso el pie para estampar la igualdad. Quizás, premio por no apichonarse ante la jerarquía del rival y la desventaja.
Sobre el final pudo haberlo ganado Las Palmas en una contra y Racing no fue claro en los metros finales para hacer preocupar al arquero rival. Punto que le sirve más al Azul que no perdió ante su rival directo y unidad que casi no suma para los de Nueva Italia que están afuera de la clasificación.
Fuente: Brigada Deportiva
