Historia
El Club Atlético Paraná es una entidad deportiva de la ciudad de San Nicolas, Argentina. Fue fundada en el barrio de Urquiza el 22 de marzo de 1949 por un grupo de civiles y militares que pertenecían a la directiva del Batallón de ingenieros del Ejercito Argentino.
A la hora de tomar un nombre para la institución, se decidió aferrarse al nombre del río que bañaba las costas de la ciudad (Río Paraná), ya que la ubicación del club es muy cercana, es así que entonces su nombre es Club Atlético Paraná.
En sus principios el club contaba con distintas disciplinas, ademas de fútbol, había basquet, boxeo, atletismo, ajedrez y varias asociaciones mas.
El primer partido de Paraná fué un mes después de su fundación frente a Teatro Municipal, por el Torneo Preparación organizado por la Liga Nicoleña. Los jugadores que salieron a la cancha fueron Cuenca, Semino, Finardi, Gonzalez, Marques, Forest, Aquiles, Bolla, Varela, Casella y Girotti, jugadores que conquistarian dicho torneo. Es así que entonces, nacía el mejor exponente del futbol nicoleño.
Paraná fue creciendo a pasos agigantados, siendo una de las entidades "futboleras" que llevó muchos años representando a la ciudad en competencias regionales, ejercidas por la Asociación del Fútbol Argentino.
En lo que va de la historia, el club logró llegar dos veces a la final del Torneo regional en los años 70, estuvo varias décadas entre los mejores cuatro clubes de la Provincia de Buenos Aires, ganó el Torneo de Campeones de la Federación Norte de la Provincia de Buenos Aires en el año 1976, jugó con equipos muy importantes en diferentes competencias y hasta recibió visitas honorables de clubes grandes como lo son River, Racing, San Lorenzo, Huracan y Boca Juniors.
Paraná, demostró ser un campeón y una cuna de campeones, un club de donde salieron cientos de figuras, un club que llevó a San Nicolás a lo mas alto del fútbol, un club lleno de jugadores que dejaban la vida en cada partido y algunos que estuvieron poco tiempo pero nos llenan de orgullo, como lo son Patricio Hernandez y Ruben Pagnanini, campeones del mundo con la Seleccion Argentina.
Muchas páginas en blanco de la historia "paranaense" esperan seguir siento escritas. Se conquistarán mas campeonatos, pero también se sumaran algunas decepciones, habrán alegrías y tristezas, se sumaran jugadores a formar el Olimpo de los ídolos "paranaenses" y otros que pasaran sin ser tan recordados, pero la marca indeleble de la pasión y del amor incondicional de sus hinchas y de los que vendrán, marcarán a fuego esta historia que nunca se detendrá, la misma que ese grupo de civiles y militares soñaron en aquellos lejanos días de marzo en 1949.
Estadio
El estadio ubicado en Rivadavia y Necochea tiene capacidad para 6.000 personas, es uno de los estadios que recibió la visita de varios grandes, hasta el mismo Flamengo de Brasil. Lleva el nombre de Manuel Lasanta, quien fué jugador, director técnico y presidente en los años mas gloriosos de Paraná.
En 1972, el "legendario" Lasanta era asesor del Teniente Coronel Carro, quien era el presidente del club. En 1973 asumió como presidente y Director Técnico, logrando ganar el campeonato nicoleño y llegar a la final del Torneo Regional, quedando a un paso del Nacional.
Camiseta
La camiseta de Paraná es mas que una simple indumentaria deportiva. Es el tesoro de cada hincha que pide a sus jugadores que la transpiren hasta la última goda de sudor. Es el manto sagrado, ese por el cual se han creado cientos de canciones venerándola. Es el símbolo que une a todos los Paranaenses diseminados por la ciudad. Es la sangre, el alma y el corazón de una hinchada que la ama incondicionalmente. Esa que lucieron tantos ídolos durante mas de medio siglo con fervor y pasión, esa es la camiseta de Paraná.
Cuenta la historia que en Marzo de 1949, apenas fundado el club, desde el Batallón se decidió que la camiseta sea blanca y con una franja celeste, representando al Río Paraná.
La camiseta de Paraná ha sufrido incesante modificacion en sus modelos a lo largo de la historia. Sus colores, en cambio, solo variaron en pocas ocaciones, hasta se llegó a jugar con una camiseta color grana, pero el celeste y blanco quedó impregnado en la piel de los Paranaenses hasta estos dias.
Pasarán mas modelos y diferentes diseños, pero la camiseta de Paraná siempre quedará grabada a fuego en la piel de los Paranaenses, en la de los jugadores que la defienden domingo a domingo, y también en la de los hinchas que soñaron ser como aquellos y la llevan en el corazón.
(Fuente: pasión paranaense)