Tras la asamblea que designó a la nueva comisión directiva, el Cruzado hizo oficial la contratación de su nuevo entrenador.
Por Cristian Castrillón (Interior Futbolero)
Dirigió a Guaymallén en el último Federal «B», pero no logró clasificarlo a la siguiente instancia. Tiene 40 años y fue defensor en sus tiempos de futbolista. En la función de director técnico, registra pasos por Huracán de San Rafael, Trinidad de San Juan y Desamparados, entre otros. Esta vez, se calza el buzo del Cruzado. Todos estos datos convergen en una sola figura: la de Andrés Villafañe.
En la asamblea que se celebró ayer, además de confirmar la continuidad de Omar Sperdutti al frente de la institución, se hizo oficial el arribo de Villafañe al banco de suplentes Botellero. La ilusión maipucina va tomando forma, y ya con comisión directiva y entrenador designados, las metas del 2015 empiezan a ganar color: «La idea es hacer un buen trabajo que nos acerque al ascenso. Pero en las charlas con los dirigentes no se planteó al mismo como un objetivo. El tiempo dirá si estamos para subir«, sostuvo el nuevo entrenador en una charla exclusiva con Interior Futbolero. Sin embargo, se mostró consciente de que en calle Vergara se respiran aires de revancha por las últimas malas actuaciones y de que sobran ganas de dejar el Federal «A»: «Después de los resultados obtenidos por otros equipos (ascenso de Gimnasia en 2014), el presidente, que tiene varios años en esto, piensa en el objetivo de lograr el ascenso. Pero sabemos que en este torneo las posibilidades son menores porque no hay tantas plazas».
Además, cuerpo técnico y dirigencia trabajarán en forma conjunta, en dirección de una misma línea y con un claro propósito: potenciar la materia prima cosechada en Maipú. «Sperdutti me dijo que tratemos de mirar mucho las inferiores para ver qué nos puede ser útil a corto, mediano y largo plazo. Es una de las premisas, aunque lo que no haya en el club lo tendremos que ir a buscar afuera», adujo Villafañe. También llegó el tiempo para el análisis de refuerzos, y si bien reconoció que hay algunos apuntados, prefirió mantener cautela en cuanto a los apellidos: «Tenemos nombres en mente, pero primero queremos mirar a los jugadores que no tienen tantos partidos y que pueden ser una buena opción para el equipo titular. Sabemos que corremos con desventaja porque hay muchos que se han ido. Hay algunos en carpeta, pero hasta no tener una dimensión real de lo que hay, no se puede decir otra cosa».
La ilusión se pone en marcha para todos los Cruzados. Y también para Villafañe, que se sabe ante una gran oportunidad para su carrera: «Es un paso muy importante. Tuve la posibilidad de haber jugado y dirigido en la categoría. Hoy se me vuelve a abrir la puerta del Federal A y ojalá que el trabajo nos permita subir».