Un 2 de agosto, pero de 2010, nacía Interior Futbolero. Nacía un nuevo sitio dedicado al fútbol federal; nacía un programa de radio acerca de sus vicisitudes, y otro de televisión con el mismo fin. Nacía una cámara presente en cada provincia. Nacía un barco más que especial para mi.
Por Julián Malek 
Con el respeto que me merecen las categorías superiores y metropolitanas, siempre las pensé como un lago. Uno conoce a ciencia cierta sus límites en cuanto a extensión y profundidad; sabe lo poco que puede verse alterado por otros factores, estancado en su constancia; y también sabe la fauna y flora que allí habitan, e incluso la cantidad (al menos) aproximada.
Pero el fútbol del interior es un océano. Un 95% inexplorado (por desidia o desinterés), con especies tan diversas como semejantes, en un número imposible de estimar. Bienaventurado el que busque historias en los siete mares; o de Ushuaia a La Quiaca, digamos.
Interior Futbolero fue mi barco a ese periplo. Salí de mi cómodo muelle en búsqueda de todo en lo que creo, y ser testigo de lo que las luces porteñas apenas alumbran. Tuve días de gran calma y buen clima; pero también de bravos oleajes.
En cuatro años que llevo en el medio, tuve una experiencia más que enriquecedora. Pude conocer provincias a las que jamás había ido, localidades que guardaban interesantes historias. No importaba la distancia o las horas de viaje, sabía que en mi destino había un enorme banquete para mi gula periodística.
Presencié hechos históricos, ascensos. Hablé con personas de todo tipo: desde el anonimato absoluto hasta estrellas de nuestro fútbol. A todos los cubrimos por igual. A todos les dimos la misma importancia. Ningún nombre estaba por encima del otro.
Me llevo cada persona que agradeció nuestra cobertura. Me llevo todo aquel que mira Interior Futbolero con el mismo cariño con el que lo veo yo, desde mucho antes de noviembre de 2016. Me llevo a todos los que en las redes sociales arengan a sus conocidos a sintonizar cierto programa de TNT Sports, que habla sobre el fútbol del interior. Me llevo a toda la gente que conocí en este medio, a la que me dio la oportunidad de crecer y que llegó hace un tiempo al muelle para que me embarcara con ellos.
Gracias Interior Futbolero. Y, por 10 años más, sigamos navegando juntos.