El Estanciero vencía en Salta a Juventud Antoniana por 1 a 0 por el encuentro de ida de las semifinales del Federal A y en una de las contras que tuvo logró convertir su segundo gol, el que prácticamente hubiese sellado el pase a la final. Sin embargo, el juez de línea levantó el banderín y marcó una posición adelantada que no existía.
Unión Aconquija se puso en ventaja cuando la primera etapa llegaba a su final. Allí, apareció Lucas Farías para romper el cero y hacer delirar al banco visitante.
En el complemento, Antoniana, con toda la responsabilidad de conseguir al menos la igualdad, adelantó sus líneas, mientras que el equipo contrario apostaba encontrar los espacios para aplicar la contra.
A los 17 minutos, los locales llegaron a la igualdad a través del experimentado Ratón Ibáñez, quien recibió una exquisita habilitación, con taco incluido, de Assennato.
Sin embargo, minutos antes a la paridad, el árbitro anuló un gol legítimo a Farías que estaba claramente habilitado. Vergonzoso. Podría haber sido triunfo, pero el empate tampoco es malo teniendo en cuenta que se define el domingo en Andalgalá y Unión corre con ventaja deportiva. El sueño del ascenso para el Estanciero sigue en pie pese a haber sido perjudicado.
