UNIÓN (Santa Fe) 3 – 0 CRUCERO DEL NORTE
El Tate sacó ventaja con un penal de Claudio Guerra a los 21′ (PT). Amplió Ignacio Malcorra a los 5′ del segundo tiempo y Martín Fabbro puso el tercero a los 30′.
Unión cortó hoy una racha negativa de partidos sin ganar al golear 3 a 0 a Crucero del Norte, en un encuentro correspondiente a la fecha 4 de la Zona B del torneo Nacional B.
Además de la importante victoria (la primera en el certamen), el equipo rojiblanco jugó bien, lo que le da más valor a un resultado que renueva el aire en el cuerpo técnico, que llegó a este partido con “la soga al cuello”.
Los primeros minutos del juego serían lo mejor de la parte inicial, porque hubo una serie de situaciones de gol en un ida y vuelta dinámico. A los 2’ hubo un remate de Romero que atajó abajo de Nereo Fernández. Sin embargo, antes de eso el Tate ya había desbordado dos veces por izquierda a través de Triverio.
A los 4’ un centro al segundo palo encontró solo a Guerra, que cabeceó desviado en una situación clarísima. Luego, a los 9’, tras un mal despeje de la defensa local, la pelota le quedó a Fileppi que le pegó de volea y el balón salió pegado al segundo palo. Pero rápidamente, a los 11’, respondió Unión con un disparo de Triverio que dio en la parte externa de la red.
Tras ese buen inicio, de a poco el local empezó imponerse, hasta que a los 22’ se puso en ventaja con gol de Claudio Guerra de penal, luego de una clara falta de Barraza sobre el delantero.
Tres minutos después fue Triverio el que de cabeza estuvo cerca de ampliar la ventaja tras una buena acción de contragolpe.
Tras la apertura del marcador Unión no se quedó, siguió siendo el dominador del encuentro, y a pesar que tuvo menos la pelota, supo manejarla mejor en un primer tiempo atractivo. Crucero tuvo alguna aproximación, pero no contó con chances para empatar. Mientras, los dirigidos por Madelón también llevaron peligro y hasta se mostraron más cerca del segundo que los misioneros de conseguir la igualdad.
En el inicio del complemento el Tate pegó rápido, a los 5’, y estiró la diferencia. Luego de una pelota recuperada en el mediocampo, vino un centro rasante desde la derecha, varios defensores y el delantero Guerra pasaron de largo, pero por el segundo palo apareció Malcorra, que de media vuelta puso el 2 a 0. Por cómo se venia jugando, parecía cosa juzgada. Y así fue, ya ese gol fue un golpe de nocaut para la visita, que nunca puso en riesgo el arco defendido por Nereo Fernández.
El resto del encuentro fue controlado sin inconvenientes por el rojiblanco, que con un buen funcionamiento del mediocampo quitó e hizo jugar.
A los 15’, tras otro centro, esta vez desde la izquierda, Triverio desvió el balón que pegó en el primer palo. Y a la media hora de juego llegaría el tercer gol: vino un pelotazo al borde del área, Montero la “peinó” al área por donde apareció Martín Fabbro, que se impuso a su marcador y casi cayéndose alcanzó a puntear la pelota ante la salida del arquero para establecer el 3 a 0.
De ahí hasta el final pudo volver a anotar el Tate, que contó con un par de situaciones muy claras. Fue triunfo y goleada, pero también se ganó merecidamente, imponiéndose al rival, cuestiones que vienen muy bien para revertir el mal momento que estaba pasando Unión.