¿Vale o no el punto? Las sensaciones del día después al clásico

ROCA 26/07/15: POR LA PRIMERA FECHA DEL TETRADECAGONAL DEL TORNEO FEDERAL A DEPORTIVO ROCA EMPATO CON EL CLUB CIPOLLETTI 1 A 1 EN EL ESTADIO LUIS MAIOLINO. NICOLAS CAPRIO LE GANA EL MANO A MANO A FERNANDO FERNANDEZ. FOTO: ANDRES MARIPE

De a poco van bajando las pulsaciones. Hora tras hora comienza a aflorar el análisis y va quedando atrás la fiebre clásica que el domingo pasado alcanzó su punto máximo. Por historia y por presente, pero fundamentalmente por cómo se desarrollaron los cuatro minutos finales del partido, Deportivo Roca y Cipolletti sacudieron el polvo de una pasión que necesitaba ser removida.

Por Diario Río Negro.

Desde la creación del Torneo Federal A, fue sin dudas el más importante de los cuatro cruces anteriores ya que la instancia no es cosa de todos los días, al menos para Deportivo Roca. Sin embargo Cipolletti, con más rodaje en este tipo de certámenes que su clásico rival, no estaba en una posición similar desde el 2010, en tiempos del viejo Argentino A.

El día después del derby terminó de confirmar la paridad, al menos si se tienen en cuenta sólo los resultados que hay entre ambos equipos en el último año. Después de dos victorias por la mínima por parte del Naranja, una del Albinegro por el mismo marcador y uno sin decisión que al momento de la suspensión favorecía a Cipo también por 1-0, el domingo se cristalizó la primera igualdad (1-1) del último año. Claro está que no fue un empate cualquiera.

Después de haber sido superado en varios pasajes del encuentro, Cipolletti se encontró con un gol a los 46′ del ST gracias a la sapiencia de un jugador distinto, que estuvo un mes y medio afuera por lesión (fractura de radio del brazo derecho) y que en una jugada sintetizó las reglas del manual de cómo se debe definir.

«Hay que sacar cosas positivas de este empate. Duele porque fue en el último minuto, pero hay que ser conscientes de que no es mal resultado. En lo personal me fui contento porque el técnico me puso unos minutos y pude hacer un gol. Me quedó una y la pude aprovechar pero hay que seguir trabajando», reconoce Oscar Negri, autor del tanto albinegro que estuvo muy cerca de llevarse el premio mayor del Maiolino.

Es el segundo gol que marca el Flaco en el estadio Naranja. El anterior fue en octubre pasado, pero de nada sirvió porque el partido terminó suspendido y el Consejo Federal le dio por perdido el juego a los dos equipos.

Un análisis similar hizo Ricardo Pancaldo en el día después de su segunda visita al club donde estuvo tres temporadas y jugó dos finales por el Argentino B. «Es un punto positivo, el empate estuvo bien. Parecía que nos íbamos con las manos vacías por cómo se dieron las cosas, pero indudablemente es importante lo que nos llevamos de visitante. Estos puntos si los revalidás de local, terminan siendo clave», apuntó el entrenador, quien como en aquella visita durante la primera fecha de la fase regular, fue insultado en el lugar que alguna calificó como «su segunda casa».

«A pesar de los insultos, recibí muchos mensajes de apoyo de gente que no se olvida de todo lo que dio este cuerpo técnico cuando nos tocó dirigir ahí», contó el DT del Albinegro, que hoy comenzará su preparación de cara al partido de la segunda fecha ante Gimnasia y Tiro de Salta, a jugarse en la Visera.

Cipolletti ya no lamenta los dos puntos perdidos, como sí lo repetía en los vestuarios del Maiolino luego de que Jonathan Morán le devolviera el alma al Depo con un gol en el tercer tiempo adicionado. El negocio de sumar de visitante comenzó a tomar fuerza en el seno del plantel Albinegro.

Por el contrario, en el Depo el discurso sigue siendo más o menos el mismo. «No merecíamos perder un partido en el que fuimos superiores. En la semana habíamos trabajo de manera diferente respecto al último partido allá (en Cipolletti). Tenía muy presente todo lo mal que hicimos en aquella derrota. La idea era jugar rápido y estar atentos los 90′. Creo que lo hicimos bien», describió Diego Landeiro.

«Lo que sí, las sensaciones se cambiaron en dos minutos. Terminando los 90′, nos lamentábamos el empate porque habíamos sido más que ellos. Después nos hicieron el gol y lamentábamos que lo estábamos perdiendo. Dos minutos más tarde la mete el Chengue (Morán) y terminamos valorando ese empate. Fue muy curioso como se dio todo», agregó el DT.

«Jugamos bien y eso me deja conforme. Es lo que más rescato más allá de cómo se dio todo al final. Valoro el empate porque estuvimos muy cerca de perderlo y porque los chicos hicieron las cosas bien. Eso me deja muy tranquilo», estimó Coco.

Y agregó: «Creo que hicimos el mejor partido desde la segunda rueda hasta acá. La presión por clasificar había atentado contra nuestro juego. El nerviosismo y la ansiedad nos complicó. La verdad es que no les puedo reprochar nada a mis jugadores. Dejaron la vida», completó.