ALL BOYS 2 – 0 BOCA UNIDOS (Corrientes)
Más allá de que esta vez hubo un factor extra que conspiró contra sus posibilidades e incidió en el resultado, como fue el mal arbitraje de Andrés Merlos, al equipo correntino le está costando generar situaciones netas de gol y la manera de convertirlo.
Jugar fuera de casa no le sienta bien a Boca Unidos. A diferencia de temporadas anteriores, parece que como si en la presente edición del torneo de la Primera B Nacional de la AFA, la mano le viene esquiva y aumenta el caudal de derrotas. Ayer, en un partido friccionado, poco claro y con escasas situaciones de gol, All Boys sacó provecho de ese déficit y terminó ganando 2-0 el partido que jugaron en Floresta por las 30ª fechas de un campeonato que se le va escapando cada vez más de las manos.
Es cierto. Esta vez hay un atenuante, el árbitro Andrés Merlos, excesivamente localista que no dudó en mostrar media docena de veces la tarjeta amarilla a los jugadores visitantes e incluso en una de ellas significó la expulsión de Matías Escobar, cuando fue a trabar fuerte y abajo la pelota con un rival y el juez entendió que lo hizo de mala manera cuando ni siquiera desde arriba se observó falta en la jugada.
Antes, a los 34’ del primer tiempo, cuando todavía estaban cero a cero, Silva la tomó en el área y cuando quiso adelantarla para su mejor perfil, el marcador central Pellegrino frenó la pelota en forma visible con la mano y Merlos dijo que siga el juego sin cobrar el claro penal, perjudicando a Boca Unidos. Eso sí, también después ignoró una infracción de Olivera a Franco Olego dentro del área haciendo señas que se tiró el delantero de All Boys.
Claro que al margen del desempeño del árbitro hay que decir que Boca Unidos no halló la manera de hacerse de espacio para armar buen juego y junto a All Boys careció de ideas tornando al partido impreciso, con muchas pelotas divididas y escaso peligro para los arcos. Algo mejoró en la parte final, pero sin llegar al nivel de bueno.
Poco fútbol se observó en la etapa inicial en la que las fricciones y el excesivo criterio riguroso del árbitro Andrés Merlos con los jugadores de Boca Unidos fue evidente.
No se había registrado ninguna situación clara de gol cuando a los 41’ Franco Olego recibió la pelota libre de marcas a espalda de Juan Bravo y desde posición ceñida tras acomodarse metió un tiro fuerte, a colocar, y el balón entró junto al segundo palo venciendo a Sessa.
Un gol de All Boys justo que se concretó en el mejor momento de Boca Unidos, que minutos antes había tenido dos aproximaciones ante centros de Cháves que primero Martín Fabro no pudo cabecear casi desde el punto del penal. Antes también Silva probó con remate desde afuera e inclusive se registró el claro penal de Mauricio Pellegrino que el árbitro no cobró en la jugada de Silva.
Poco para cuarenta y cinco minutos, en una cancha muy angosta que tampoco favoreció al espectáculo. Fabro y Oviedo no pudieron armar el juego de Boca Unidos, las corridas de Cháves por la izquierda finalizaban con muchas pelotas en el camino y entonces la movilidad de Silva no fue suficiente, al no tener el acompañamiento necesario del juvenil Valsangiacomo absorbido por la marca.
Para colmo de males, a los 25’ se lesionó Matías Moisés, que hasta ahí había cumplido un buen desempeño y tuvo que ser sustituido por Emanuel Olivera, que en su primera intervención despejó una situación riesgosa para el arco de Sessa. Antes, el “Gato” solo había intervenido ante un centro fuerte de Arciero que cortó bien arrojándose.
All Boys tampoco había hecho mérito suficiente para irse en ventaja porque sólo acertó en el gol, que le dio la diferencia mínima y tuvo en Mazurek, Jaime y Olego a los tres intentando generar algo de fútbol, respaldado en una defensa donde respondió muy bien Pellegrino.
Mejoró un poquito el juego en el segundo tiempo y con Boca Unidos saliendo a buscar la igualdad avisó a los 8’ con un tiro libre de Fabro (se metió más en el partido) que despejó el arquero Losa hacia un costado. Después fue Baroni el que cabeceó hostigado por la marca y la pelota cruzó frente al arco.
Hasta que a los 20’ fue expulsado Escobar al entender el árbitro, de mal desempeño, que el jugador de Boca Unidos barrió la pierna del rival y la visita quedó con diez, cuando dos minutos antes, Pablo Vergara había entrado por el lateral Bravo en una apuesta ofensiva del entrenador Ricardo Rodríguez.
Entonces tuvo que bajar un poco Oviedo sobre el costado derecho y Fabro pasó a jugar en el medio en la función de 5.
No se notó la diferencia numérica porque All Boys no tenía el control de la pelota que la empezó a jugar mejor Boca Unidos, aunque sin la profundidad necesaria ante su falta del delantero referente de área. A los 24’ Fabro encaró as Martínez, le tiró un caño y sacó un fuerte remate que el arquero Losa rechazó al córner. Dos más tarde el penal no cobrado a Olivera por falta sobre Olegom, en los instantes en que el local trató de salir rápido en ataque ante el lógico adelantamiento del equipo “aurirrojo”.
Así, con uno buscando el empate con diez jugadores y otro agazapado para meter la contra letal, a los 35’ el lateral Martínez se mandó y recibió de Lucas Espíndola, la tocó hacia atrás en el área y el tiro a colocar de Mazurek dejó sin chances a Sessa.
El segundo gol de All Boyas desarmó a Boca Unidos, que a pesar del empeño de sus jugadores no pudo impedir la nueva derrota de visitante. Por la de ayer acumula octava y lo que es más alarmante, el equipo sigue alejado de los caminos del gol. Se fueron varios goleadores y hoy eso se hace notar y sentir. Habrá que ver cómo el técnico Rodríguez encuentra la solución.
Fuente: Diario Época
Foto: Archivo