Marcelo Molina: «Dejo Achirense con la deuda del ascenso, ojalá que el fútbol me dé la posibilidad de saldarla»

El director técnico tucumano decidió dar un paso al costado del club entrerriano de común acuerdo con la dirigencia. El entrenador se marcha del Pollero tras cuatro años donde alternó su trabajo en el Regional y la Liga Departamental, en los que consiguió cinco títulos a nivel local y llevó a Achírense a la histórica y polémica final con Güemes por el ascenso al Federal 2019.

POR JOAQUÍN SBROLLA (INTERIOR FUTBOLERO)

IF: – ¿Por qué decidió irse en plena mitad del campeonato de liga (NdR: Departamental de Fútbol de Colón) con Achirense estando primero y con serias posibilidades de salir otra vez campeón?

MM: – Llegué al club a fines del 2018 con el objetivo de jugar el primer torneo regional con el nuevo formato de ascenso. Llego a un nuevo proyecto en donde la prioridad era jugar con chicos del club en su mayoría y de sólo contar con 4 o 5 refuerzos. Hicimos una campaña de ascenso que terminamos quedando en las puertas del ascenso ante Güemes de Santiago del Estero . Después el club me dio continuidad en ese proyecto con los objetivos claros de ganar la liga local cada año y de esa manera obtener la plaza al Regional. Así lo vinimos haciendo durante 4 años logrando esos objetivos. Muchas veces en el fútbol el tiempo es un aliado o apremia. En este caso, el club decidió hacer un cambio y así en común acuerdo y siempre agradecido por la confianza que recibí de los dirigentes hoy está terminando mi ciclo en Achirense.

IF: -¿Qué es lo que más destaca de su ciclo en estos 4 años y medio al frente de Achirense?

MM: – Siempre que hablo con el grupo se lo agradezco, porque el plantel que fui conduciendo a lo largo de estos cuatro años y medio fueron variando y pasando muchos jugadores. Esos jugadores con predisposición siempre para mejorar el respeto que tuvieron todos conmigo, son los que sostuvieron mi trabajo todo este tiempo. Se los agradezco siempre, al igual que a mis compañeros. Teníamos dos objetivos claros en el club al comienzo de cada pretemporada, que eran ganar el torneo anual para obtener la plaza para disputar el Regional, algo que lo logramos todos los años y ascender al Federal que lamentablemente no se dio.

IF: – Y en esos grupos de jugadores, muchos de ellos fueron producto de las divisiones inferiores, ¿cómo se logra mantener esa base en la institución y lograr así cada año el liga local?

MM: -El plantel en su mayoría son jugadores del club. Los «refuerzos » que fueron llegando cada año siempre fueron del ámbito local, de la misma liga, para cubrir o reemplazar jugadores que en algunos casos fueron buscando otras oportunidades. Como por ejemplo Enzo Luna, un chico que cuando llegué al club se destacaba en su categoría la Cuarta División y lo sumamos al plantel del Regional donde debutó en ese torneo y hoy está en Huracán en Primera División. Así como en otros casos que fuimos renovando el plantel y siempre buscando proyectar jugadores de inferiores, en el club había buena base y con algunos jugadores mayores fuimos ayudándolos a crecer. Creo que la continuidad del proyecto de parte del club fue lo que provocó poder sostener el proyecto con más resultados. Que es muy difícil lograrlo juntos.

IF ¿Qué sabor le trae la final perdida con Güemes? ¿Siente que pudo haber sido la culminación de su carrera y para el propio club pese a lo que sucedió con el arbitraje? (NdR: el Gaucho ganó 3-0 el partido de vuelta en Santiago con un gol en offside y otro penal polémico)

MM: – Esa final fue unos de los momentos más difícil que viví en el fútbol, más estando al frente del grupo. Fue un torneo muy difícil a lo largo de todas las fases, nos preparamos para llegar lo más lejos posible. En nuestros análisis hicimos todo lo que un equipo necesita hacer durante el torneo para llegar a jugar hasta el último día de esa competición. El grupo con mucha confianza, el equipo adentro de la cancha no se le podía pedir más. En fin, desde los dirigentes, cuerpo técnico y jugadores redondeamos un torneo ideal, incluso ganar la primera final (NdR: Achirense se impuso 2-1 de local) . Sabíamos que nos enfrentábamos a un equipo con historia, con un plantel colmado de jugadores de jerarquía, pero nosotros como te dije antes nos daba la sensación desde todo análisis que habíamos hecho todo bien. Después de todo lo que pasó en ese partido de vuelta en Santiago, el día más difícil para mí fue pararme frente del grupo y mirarlos a la cara a mis jugadores, me quedé sin palabras ¿Cómo les explicaba todo lo que nos sucedió si hicimos todo bien? Fue muy difícil .

IF: -¿Esa definición por el ascenso fue su mayor alegría y su mayor tristeza en Achirense?

MM: – Creo que ese partido nos marcó a todos. Al club, al plantel que tocó jugar esa final, y a mí en particular porque ahí resumo las dos cosas. La mayor alegría que viví en el club fue poder viajar con el plantel completo incluyendo jugadores de inferiores que formaban parte del mismo a hacerles vivir esa experiencia previa a una final. Eran chicos que conocieron por primera vez Santiago del Estero, que convivieron 3 días en una concentración más todo lo que rodea a una final , esa fue la alegría más grande. Y mi mayor tristeza en Achirense fue no poder ascender.

IF: – ¿Qué es lo que le falta a un club como Achirense siendo tan joven y tan buena infraestructura con dirigentes de peso económico como Guillermo Bonnin, dueño de una conocida industria avícola, para poder por fin pegar el salto y ascender al Federal?

MM: -Achirense es una gran familia. Es un club joven (NdR: se fundó en 2008) , con dirigentes muy futboleros como Guillermo Bonnin a la cabeza que son excelentes personas , con la idea permanente de hacer cosas para que el club siga creciendo. Hoy está en plena obra un predio que cuenta con varias canchas incluído hockey. Tiene todas las condiciones para trascender, seguramente no va a pasar mucho tiempo que Achirense pegue el salto de categoría, sólo será cuestión de que se lo proponga .

IF: – Como bien dijiste, sólo hay agradecimientos hacia él y a toda la dirigencia por confiar en vos, ¿no?

MM: -Después de cuatro años y medio en el club, sólo tengo palabras de agradecimiento para Guillermo Bonnin, Vilma Gabioud y Pablo Cartosio, los pilares de Achirense , por la confianza , la libertad que me dieron para trabajar todos estos años y sobre todas las cosas de la forma que me hicieron sentir en mi estadía en Colón, Entre Ríos. Siempre ganamos la plaza a través del torneo anual de la liga. Me voy dejando al club con las mismas chances de ascender como cuando llegue , la deuda del ascenso …ojalá que el fútbol me de de la posibilidad de saldarla. (NdR: También perdió una semifinal por el ascenso con Racing de Olavarría en el Federal B 2017).

IF: – ¿Cómo se define usted como DT?

MM: – Si me tuviera que definir como DT, diría que la única forma que conozco de poder permanecer en un club, con lo volátil que es el fútbol, es trabajar mucho en mejorar cada día al jugador. Hay que darles todas la herramientas para que mejore todo el tiempo, porque en definitiva los que sostienen nuestro trabajo son ellos , hay que ayudarlos y cuidarlos. Después, el resto es fútbol.

IF: – ¿Qué estilo de juego propone y filosofía futbolística en el manejo del grupo?

MM: – Más allá de los conceptos que manejemos cada entrenador, la esencia del fútbol siempre tenemos que recordárselas a los jugadores, como cuando jugábamos en el barrio, o en la escuela. Cuando agarramos la pelota déjala así de chiquita, jugando y pidiéndola todo el tiempo y cuando no la tenemos corren todos para recuperarla. No hay figuras para eso, jugamos todos y quitamos todo. En cuanto al manejo del grupo siempre antes de tomar decisiones o marcarles un error o corregirle a un jugador. Siempre se las digo de la forma que a mí me gustaba que me la dijeran , de la manera que mejor entendía. El plantel tiene que tener libertad.

IF: – ¿Es por ese tipo de trato con los futbolistas que Colón de Santa Fe confío en usted como técnico de inferiores ?

MM: -Tal vez. Colón fue el club que me marcó mucho. Jugué en inferiores, luego tuve el privilegio de formar parte del ascenso a Primera en el 95 y me dio la posibilidad de formar jugadores, Colón es como mi casa. Estoy radicado en santa fe pese a que soy de San Miguel de Tucumán. Tuve la posibilidad de tener en los planteles que dirigí, a Alex Vigo, Tomás Chancalay, Facundo Garcés, Brian Farioli, Eric Mesa, Ignacio Chicco, entre los que trascendieron y hoy están consolidados en Primera.

IF: – ¿Cómo se dio su inicio en la carrera como técnico?

MM: -Me recibí en el 2000, empecé trabajando en la Liga Santafesina unos años hasta que surgió la posibilidad de empezar a trabajar en Federal B, como ayudante en Sol de América de Formosa y Boca Unidos de Corrientes. Luego me largué solo a dirigir en Coquimbo de Chile, Racing de Olavarría y Achirense.

IF: – En Boca Unidos integró el cuerpo técnico de Frank Kudelka ¿Cuán clave fue él en su formación como entrenador?

MM: -Trabajé unos meses como colaborador de Dario Kudelka antes de la posibilidad de ir a Chile. Aprendí muchísimo de Kudelka. Todo lo que él logró en el fútbol nada fue casualidad, trabaja muchísimo. Él me marcó en ese aspecto, el hábito del trabajo. Lo admiro mucho.

IF: – Usted dijo que el fútbol es muy volátil sobre todo para los directores técnicos ¿En su próximo desafío como DT espera poder estar en una institución que tenga el orden de Achirense para mantenerse por un buen tiempo y poder trabajar tranquilo ?

MM: -Ojalá pueda tener esa posibilidad de trabajar en un club ordenado, o al menos que me dé las herramientas básicas para poder desarrollar mi trabajo de la mejor manera. Eso significaría poder preparar y mejorar a mis jugadores, que en definitiva son los que sostienen nuestro trabajo porque al trabajo se lo conserva con trabajo, más allá de que el fútbol sea volátil y no espere a nadie.