ATLÉTICO TUCUMÁN 0 – 1 UNIÓN (Santa Fe)
El Tate consiguió la primera victoria como visitante. El gol lo convirtió Guerra, a los 5 minutos del segundo tiempo. Con este resultado se acomodó como escolta del duro torneo de ascenso, en la zona B.
El gol de Guerra no llegó como consecuencia de esto último (córner de Rivas y aparición del goleador para sorprender a Luchetti y a toda la defensa), pero la estrategia tatengue fue esa: esperar y jugar con espacios amplios en el terreno adversario. Ya en el primer tiempo tuvo dificultades a partir de la escalada de Casais y Evangelista por los dos laterales, que preocuparon en demasía a Montero y a Malcorra, al punto tal que Unión perdió así referencias de juego en la mitad de la cancha. El equipo no tuvo la pelota y llegó en sólo dos ocasiones con chances al arco de Luchetti. Una fue producto de un rebote que, con mucha fortuna, fue a la cabeza de un Guerra que no le dio buen destino. Y la otra, un contragolpe que Rivas desaprovechó metiendo un centro a rastrón para la llegada inoportuna de Barisone, cuando podría haber rematado al arco o dársela con más precisión a su compañero.
El dominio de Atlético se hizo claro y apareció la figura de Nereo (el mejor de Unión junto con Sánchez), para taparle un mano a mano a García en un momento clave del partido, ya que iban apenas 20 minutos y Atlético, de haber convertido el gol, hubiese tenido más tranquilidad.
El segundo tiempo de Unión fue diferente. El equipo entró con otra predisposición, más metido en el partido, mejorando en la marca por los costados -sobre todo por el de un Britez que fue de menor a mayor- y saliendo rápidamente de contra. Cuando Guerra marcó el gol, las dos posiciones quedaron evidenciadas y se hizo un partido más abierto. Lo bueno de Unión, fue que el equipo supo responder a la exigencia de tener que cuidar un resultado ajustado y favorable durante casi todo un tiempo (el gol de Guerra fue a los cinco minutos). Madelón puso a Caballero y a Bruna para darle más aire y marca al mediocampo pero nunca dejó de tener dos referencias arriba, por eso lo metió a Gamba por Guerra cuando vio cansado al goleador.
Atlético se fue con todo al ataque pero sin muchas ideas. Lo poco que preocupó fue bien resuelto por una defensa que aguantó muy bien y que esta vez, por fin, le dio la solidez suficiente al equipo para sostener el resultado.
Puede que el triunfo haya sido un premio exagerado para Unión, pero lo hecho en el segundo tiempo fue suficiente para acumular algunos merecimientos. Son los que le dieron a Unión un triunfo resonante, quizás el más importante de todos en este torneo, que lo encaminan sin ninguna duda a ser un candidato a ascender.