Trabajo, trabajo y más trabajo. De eso se trata para mejorar día a día. Por los lamentables hechos de las últimas semanas, Sportivo Belgrano tuvo ese tiempo para seguir puliendo su andamiaje.
Su último partido fue el 10 de mayo, después prosiguió la trunca posibilidad de jugar con Ferro dos veces por el duelo declarado por AFA y 20 días después pisará nuevamente una cancha visitando a Villa Dálmine. Sportivo Belgrano aprovechó ese tiempo para seguir entrenando y dándole forma al equipo en vísperas de mejoría futbolística que denote resultados.
Más allá de la duda que puede generar el regreso de Gabriel Colombatti tras su lesión y si jugará en lugar de Verino; el resto ya está más que confirmado por el DT verde Carlos Trullet. El tridente ofensivo es el punto más fuerte (Insaurralde, Aróstegui y López Macri), el arquero con la defensa no terminó su periodo de variantes (antes Urquiza y García, hoy Guruceaga y García Basso), pero la incertidumbre siempre parece estar rondando en el mediocampo.
Con Ramírez, Fabello y Álvarez Suárez queriendo asentarse, la búsqueda del equilibrio defensa/ataque con ocupación de espacios es la materia pendiente que aún resta aprobar. Tal es el caso que los nombres que se examinan para incorporar en la segunda ronda es para reforzar esa zona (al menos uno).
En las últimas dos semanas el andamiaje, aunque sea en los entrenamientos, tuvo su continuidad con la intención de que pueda quedar reflejado el sábado en Campana cuando se mida con Villa Dálmine.
Fuente: Diario Sports