Sarmiento (Ay.) se despidió con orgullo ante Germinal, que pasó a semis

SARMIENTO (Ayacucho) 1 (1) – 1 (3) GERMINAL (Rawson)

Se terminó la ilusión, el sueño, las ansias de llegar a lo más alto. Llegó a su fin tras el empate en uno en la noche de este jueves en el Municipal de Ayacucho entre Sarmiento y Germinal, que enfrentará a Villa Mitre en la semifinal por el ascenso.

Gran orgullo deben sentir este grupo pequeño de dirigentes, tildados con distintos adjetivos calificativos por haber encarado semejante empresa. Ellos, con mucho amor propio, con mucho sentimiento por los colores, sacando todo de sí, lograron armar un plantel que más allá de haber sido muy corto, supo hacerse fuerte, supo ser respetado, reconocido, competitivo, de esos que el resto no quiere enfrentar por lo que exige a su rival de turno.

Comandado por un Horacio Giangiobbe que hizo sus experiencias en las grandes ligas como ayudante de Juan Pedro Erreguerena, muchos sostuvieron que le faltaba roce como cabeza del cuerpo técnico pero él, “el Bocha”, un tipo muy querido en el ambiente, bonachón, de gran corazón, apareció para ponerle el pecho a las balas cuando el DT contratado en el inicio de la pretemporada como Álvarez se fue.

Germinal se instaló en la instancia semifinal del Torneo Federal B. Igualó 1 a 1 con Sarmiento de Ayacucho, como visitante, en el partido de vuelta por los cuartos de final. El empate favoreció al equipo de Rawson por el 2-0 logrado en El Fortín, en la ida. Maximiliano Ciarniello puso en ventaja al elenco local con un penal en el minuto 39 de la etapa inicial. El empate llegó por Darío Zampini, sobre los 37′ del complemento.

Todo un pueblo, como hacía tiempo no se veía en la cancha, con unas 1500 personas, se quedaron en la salida de los vestuarios para aplaudir de pié, reconociendo la humildad, sabiendo que hayan nacido o no en estas tierras, ya son nuestros, de nuestro pueblo, bien de Ayacucho.

Fuente y foto: Ayacuchoaldia.com.ar y Diario Jornada