El volante de Unión Villa Krause mostró su satisfacción por el buen momento futbolístico que atraviesa la institución y palpitó el duelo de esta noche ante el elenco de Sunchales.
A pocas horas del inicio de una nueva instancia del Federal A, que enfrentará Unión Villa Krause con Unión de Sunchales, el volante Alfredo Molina dialogó con Interior Futbolero y expresó su satisfacción por el presente futbolístico del Azul: «No somos una sorpresa en este torneo. En la primera fase estuvimos con equipos fuertes como Talleres, Defensores y Juventud Unida de San Luis. Les jugamos de igual a igual y no fueron más que nosotros. Sabemos que podemos llegar lejos«.
Acerca del Bicho de Sunchales, el próximo adversario, sostuvo: «Ahora nos enfrentamos a un rival duro y difícil, ya jugamos una vez hace unos años en el Argentino B. Fue un partido muy lindo, una llave muy buena, en la que pudimos pasar a la final después de una definición por penales».
«Unión tiene delanteros muy buenos, interesantes. Cuentan con un mediocampo que corre mucho y que es muy ordenado. No hay rivales fáciles, si clasificaron es por algo», agregó Molina, una de las figuras del equipo sanjuanino.
También se refirió al planteo que adoptará Unión para el juego inaugural de la fase, que se disputará por la noche en San Juan: «Nuestra idea es ganar como sea. Nos conformamos con un 1-0, porque los partidos son muy parejos. No tenemos que desesperarnos y sabemos que debemos hacer circular mucho la pelota». «Nuestro objetivo es pasar a Unión de Sunchales y nos queremos pensar más allá. Pero uno igualmente se ilusiona y pensamos en el ascenso, pero sabemos que debemos estar tranquilos y pasar este playoff», añadió Luto.
Con la llegada de Raúl Antuña a la dirección técnica de Unión, la posición de Luto Molina cambió para amoldarse en el nuevo planteo táctico como mediapunta detrás de un único delantero. «No tengo ningún problema con este sistema. El equipo se adaptó muy bien. Es un esquema mentiroso, porque parece defensivo pero es bastante ofensivo, porque terminamos con cinco o seis jugadores en ataque», sostuvo.
Sobre las posibilidades de poner un punto final a su carrera futbolística una vez que finalice el torneo, aclaró: «A principio de año decidí dejar el fútbol, porque llevo más de veinte años. Pero vamos a ver hasta adónde llegamos con Unión y qué opina la familia».
Más allá del buen presente futbolístico, el plantel Azul tuvo que superar duros escollos extradeportivos durante toda la temporada, como el atraso de varios meses en el pago de sus sueldos. Esta tensa situación complicó las posibilidades de algunos jugadores para asistir a los entrenamientos, y hasta incluso adoptaron una medida de huelga hace unas semanas atrás: «La mayoría de los chicos dependen sólo de lo futbolístico para mantener a sus familias. Ese es su único ingreso y en más de una oportunidad muchos pensaron en largar todo y volver a sus provincias». «Los que somos de acá, los contuvimos y les hicimos ver que si llegamos a última instancia y si tenemos un buen rendimiento deportivo, ellos podrían arreglar un buen contrato acá o en otro lugar. Es una buena vidriera», agregó.
