El plantel profesional de Santamarina atraviesa una difícil situación financiera que se ha extendido durante varios meses. Los jugadores denunciaron que no cobran sus salarios desde mayo, lo que ha generado complicaciones importantes para cubrir gastos básicos como alimentación y vivienda.
La falta de pagos no afecta únicamente a los futbolistas, sino también a otros sectores del club, incluyendo al personal médico, utileros y empleados generales. Esta situación se ha vuelto insostenible para varios integrantes del equipo, que deben afrontar alquileres y otras obligaciones sin contar con los ingresos correspondientes.
Ante este panorama, la dirigencia del club emitió un comunicado oficial en el que reconoció la existencia de deudas, pero aseguró estar trabajando para cumplir con los compromisos asumidos. Indicaron que durante la última semana se abonaron partes de los haberes pendientes al cuerpo técnico, al personal médico y a otros colaboradores, además de comenzar a regularizar alquileres y cancelar montos adeudados mediante cheques por más de 20 millones de pesos.
Desde la institución también explicaron que, a pesar de las dificultades, lograron cubrir los gastos logísticos de los viajes recientes, como el realizado a Mendoza y el programado a Puerto Madryn para enfrentar a Guillermo Brown, que representaron una erogación cercana a los 10 millones de pesos.
Pese a estos esfuerzos, el retraso en el pago de salarios continúa generando preocupación entre los futbolistas. Si bien manifestaron su intención de seguir compitiendo con profesionalismo y respeto en las últimas fechas, reiteraron la necesidad de una solución urgente que les permita continuar en condiciones dignas.
