Roberto Trotta, de Sarmiento de Pigüé a la gloria mundial

El defensor pasó por el ciclo de entrevistas «IG Lives» de Interior Futbolero y repasó toda su carrera, destacando su infancia y comienzos en el Colegio La Salle, sus pasos por Sarmiento de Pigüé, Estudiantes y River, su relación con el hincha de Vélez y el recordado enfrentamiento (penal picado incluído) con Chilavert.

«Mi viejo era jugador de fútbol en el pueblo, por eso lo empecé a tomar en serio desde chiquito, ya me gustaba entrenar y jugar» destacó Roberto Trotta sobre los primeros pasos en su pasión por el fútbol creciendo en Pigüé, Provincia de Buenos Aires.

«Aprendí muchísimo y comencé a jugar desde el Colegio La Salle, después de eso me inscribí en Sarmiento de Pigüé, donde arranqué a competir en torneos, ya en competiciones oficiales» comentó, «le pegaba fuerte a la pelota y me gustaba hacer goles, me divertí mucho y disfruté mucho mi infancia, mis viejos hicieron que nunca me faltase nada».

El defensor también hizo hincapié en su llegada a las inferiores de Estudiantes, en la primera prueba para el club de La Plata. «Cuando me probé en Estudiantes el técnico era la ‘Bruja’ Verón (padre de Juan Sebastián e ídolo del club), era mi cumpleaños, y me dijo ‘bueno, si querés quedarte andá y firmá». Les pedí que me dejaran llamar a mi casa, al pueblo, y mi vieja me dijo ‘de ninguna manera’, que me vuelva, así que le pedí que le pasará el teléfono a papá para que la pueda convencer, ‘yo me quedo acá’ le dije.»

La entrevista pasó por muchos puntos de su carrera hasta llegar al recordadísimo partido entre Vélez y River, donde el defensor campeón del mundo con el club de Villa Luro y enfrentado a la parcialidad velezana, definió un penal justo ante Chilavert picando la pelota con categoría y descargándose en un furioso grito de gol.

«Fue una locura. De haberlo errado el Tolo Gallego me hubiera sacado del equipo. En ese partido me había tocado meter un gol en contra, tras un mal despeje. Ya venía con algo de pica con la gente de Vélez además», recordó Trotta sobre esa noche «yo tenía una apuesta con el ‘Gato’ Sessa que me desafió a picarla, y en el primer penal le pegué fuerte y me lo anularon, así que aproveché y se la piqué. Siempre digo que para poder sobresalir a veces hay que hacer locuras, esas cosas son las que te marcan mucho».