Un recuerdo imborrable: cuando Rosario Central venció al Napoli de Maradona

La década del 80′ fue más que dinámica para los hinchas de Rosario Central. Vivieron dos títulos, un descenso, participaciones en Copa Libertadores e incluso los festejos de su centenario. Muchas historias emotivas pueden desprenderse de estas epopeyas, aunque una resulta más que peculiar. En 1987, envestido por su condición de campeón del fútbol argentino, los canallas hicieron historia al vencer en Italia al mejor equipo del su «calcio», el Napoli de Diego Armando Maradona.

Rosario Central vivía una de sus mejores etapas. Luego de haber transitado por la segunda divisional, se convirtió en el primer equipo que consumaba un título nacional en condición de reciente ascendido. Esto le supuso mayor exposición internacional, giras por Estados Unidos y duelos formidables contra rivales de alto fuste. Jorge Balbis lo recordó muy bien en diálogo con Interior Futbolero: «Fue una muy linda etapa de Rosario Central. Ese equipo salió campeón e inmediatamente nos invitaron a una serie de amistosos por varios lados. Me parece que fue por agosto cuando nos invitaron a otro torneo, que fue un partido contra el Nápoli. Campeón de Argentina contra campeón de Italia«.

«Había que llevar un equipo que le gustara jugar, que tampoco vaya allá y le gane o le pegue un baile. Pensaron en Central y fuimos«, agrega el autor del único tanto en aquella ejemplar victoria. Sin embargo, aclara que no fue pura suerte: «En ningún momento el equipo se sintió nervioso. Siempre estuvo mejor Central. Ganamos 1-0 pero podríamos haber hecho un par de goles más«.

«Se ganó por un gol pero se podrían haber hecho algunos mas. Fuimos superiores al Napoli«, remarca en relación a lo último mencionado. Aunque no solo su gol fue protagonista del duelo: «Medio que inventaron un penal, fue muy alevoso«. Fue Maradona quien tomó ese compromiso, aunque Lanaris logró contener ese remate. «Gracias a Dios se hizo justicia«, añadió el exdefensor.

Acerca de «Pelusa», destacó la «admiración que uno tenía en ese momento con el que era el mejor del mundo«. A su vez, aseveró: «Maradona nos mostró lo que muestra siempre: esa humildad, ese compañerismo con su colega. Siempre brindandose, saludando a todo el mundo, vino al vestuario a saludar a todos«.