Otra vez en el clásico hubieron incidentes, esta vez fue con el transporte de los jugadores del Naranja. Sucedió con un grupo de hinchas que los apredreó mientras viajaban rumbo a Cipolletti.
Como consecuencias, una de las piedras atravesó uno de los vidrios de la puerta e impactó en el tobillo de un auxiliar de Roca, Lucas Flores.