Manuel Berra, jugador de Independiente de Neuquén, habló con Interior Futbolero Radio donde, pese a mostrarse completamente apenado por lo sucedido con aquel hincha que agredió, también destacó que «la noticia se le fue de las manos a los medios».
Pese a que la violencia siempre es repudiable, sea el contexto que sea, se puede llegar a comprender el motivo que llevó al hombre del Albirrojo a realizar su acción. Si el problema se analizase de raíz, se llegaría rápidamente a la conclusión que la falta del accionar de la policía hizo que el simpatizante continúe arrojando proyectiles a la platea, en la cual estaban los familiares de muchos jugadores del equipo. Hoy por hoy, el jugador de 36 años está pagando los platos rotos por haber reaccionado de cierta manera ante un incidente que nunca debería haber ocurrido.
En los primeros instantes de la nota, el volante comentó tristemente: «Me acabo de enterar que hay un informe de por medio y que estoy suspendido de manera indefinida». «No entiendo el motivo de mi sanción», agregó.
En cuando a lo que fue la situación previa a lo sucedido, Manuel comentó: «Fuimos a reclamarle a los hinchas que no le arrojen piedras a nuestros familiares». El jugador también detalló que «los hinchas tenían bronca con algunos compañeros».
Además, Berra explicó que su intención no era agredir al simpatizante, si no más bien tratar de hacer que cese su accionar y evitar que alguien de alguna familia sea lastimado: «Mi intención era empujar el alambrado para que los hinchas se alejen de la platea donde estaban nuestros familiares».
Pasando a lo que es la actualidad del equipo neuquino, de cara a lo que se viene, el mediocampista sentenció con total firmeza: «Tenemos mucha fe para revertir esta situación».