El defensor tiene una fuerte contractura y se estima que no llegará al partido del domingo. También Barrado continúa con su trabajo de recuperación, mientras que se espera por José Vizcarra, para ver si lo habilitan.
De a poco se van tratando de superar las huellas de la angustia que dejó la muerte súbita del jugador Cristian Gómez, de Atlético Paraná, durante el partido que Boca Unidos le ganaba el domingo a los entrerrianos (1-0) y debió suspenderse por el trágico suceso que enlutó una vez más al fútbol argentino.
Eso sí, hay jugadores que presentan lesiones y afecciones físicas. La más seria es la contractura que sufrió el colombiano Juan Bravo, autor del gol frente a Atlético Paraná en el suspendido partido a los 32’ del primer tiempo. Prácticamente está descartado para el domingo ante Gimnasia y Esgrima en Mendoza. Lo más probable es que para este partido Ricardone vuelva al lateral derecho.
Otro que tiene molestias físicas en Matías Moisés, aunque en este caso se estima que llegaría bien al partido. Por su parte, Diego Barrado sigue realizando trabajos de kinesiología por la fuerte contractura en el isquiotibial de la pierna derecha, que sufrió al promediar el segundo tiempo contra Unión de Mar del Plata y que le impidió jugar frente a Atlético Paraná. En caso de no recuperarse plenamente, es un hecho que continuará en su lugar Julio Montero, que se va acostumbrando rápido a jugar en primera división.
Esta mañana, después del día libre que el cuerpo técnico le concedió a los jugadores, volverá a los entrenamientos el plantel de Boca Unidos, para ajustar su puesta a punto para el partido que este domingo jugará en Mendoza frente al local Gimnasia y Esgrima, por la 17ª fecha del torneo de la Primera B Nacional de la AFA con el arbitraje de Mariano González.
En lo que respecta a los demás jugadores, la mayoría terminaron bien en los treinta minutos que jugaron con Atlético Paraná y no tendrían problemas para formar parte del plantel.
Para hoy es posible que el entrenador Roberto Saucedo decida una práctica con movimientos tácticos, tareas de ataque y definición, para ir “ajustando” el funcionamiento colectivo.
Como se sabe, la delegación de Boca Unidos viajará el sábado a la mañana, vía aérea, rumbo a Mendoza y la idea sería alojarse en la localidad cercana de Maipú y esperar ahí hasta horas antes del partido.
Para el traslado en tierra mendocina, el viernes a la tarde saldrá el ómnibus especial, que a su vez llevará la utilería, a personas del club encargadas de las cuestiones administrativas y posiblemente también viajen algunos directivos del club.
Fuente: Diario Época