Tarde con viento helado sobre la capital santacruceña, con ráfagas que alcanzaron los 80 kilómetros y público rodeando el campo de juego. Boxing de Río Gallegos y Cruz del Sur de Bariloche jugaron el partido correspondiente a la quinta fecha para la Zona 1 del Torneo Federal B a partir de las 17:30.

El primer tiempo resultó tedioso, con mayor dominio de los cruzados que se dedicaron a cuidarse del viento en contra, con todo lo que ello implica, como por ejemplo los tiros de media y larga distancia que pueden cambiar la dirección del balón en juego del rival.Los de Padín llegaron al área rival y generaron situaciones, pero al momento de abrochar con festejo, todo quedó en exclamaciones de frustración.Los delanteros Echave y Martella estuvieron lejos uno de otro y no se vio conexión con las líneas cercanas.

Por momentos, los pelotazos cobraron protagonismo y la posibilidad de ponerse en ventaja sobre la visita se fue diluyendo con el correr de los minutos.Cruz del Sur se mostró más seguro sobre el sintético sureño, rotó el balón entre Rivero y Montero para alcanzar balones a Montero o Pinilla.A los 39 y de palomita, Franco Montero abrió la cuenta aportando cierto alivio al equipo. Para Boxing fue duro de asimilar, la idea antes de salir al campo de juego era no dejarse arrebatar nada, que cada jugador se mantuviera cerca del compañero, que todos fueran uno, pero con el paso del tiempo se desarticularon y llegaron al cierre del primer capítulo con una derrota sobre los hombros.

Decidido a cambiar la situación, Boxing sacó pecho y mostró la intención con los primeros pases rumbo al arco rival. Se metieron más en el partido, buscaron achicar espacios entre sí para evitar que el balón sea interceptado por los cruzados, que continuaron con su táctica efectiva de juego que mostró falencias en la defensa, situación compensada por la magra ofensiva local.

Uno de los cambios del DT riogalleguense fue el de Jara por Christopher Lukascheuski, el más acertado ya que fue él quien a los 24 minutos acomodaba el tanteador y emparejaba la situación de desventaja. Un error de la defensa de Cruz del Sur propició que mediante un cabezazo el ingresado mandara el balón contra las cuerdas del arco custodiado por Luna.

Con este cambio de situación, Padín ordenó ir a por el segundo, había tiempo y ganas para ello, pero no estaban solos en la cancha y el rival, con mayor aplomo, contaba con el viento a favor, un factor que condicionaba en estos 45 a los dueños de casa.Poco antes del final, Montero clavó la pelota en el arco de Contreras pero todo quedó en la nada cuando el árbitro Sepúlveda vio el banderín en alto de su asistente. Amargura para los de Bariloche y alivio para los de Río Gallegos.Final del partido y a pensar en la próxima fecha.